sábado, 28 de junio de 2008

Poner los cuernos a la vikinga

Los vikingos dejaron más cosas para la posteridad además de su leyenda y terrible fama, su mitología y sus dotes como navegantes., como por ejemplo la expresión que ha llegado hasta nuestros días de "poner los cuernos".

Estos fieros pobladores de los países nórdicos tenían por costumbre que el jefe de cada una de las tribus o de las comarcas (en función del origen, pues los vikingos noruegos, suecos o daneses no se regían exactamente por las mismas costumbres) pudiera escoger entre todas las mujeres jóvenes de su territorio o de su clan a la que estimara más conveniente para contraer matrimonio o simplemente como amante, frente a lo que tenían que hacer el resto de vikingos (en las uniones entre ellos, pues con el resto se las gastaban de otra manera muy suya bastante más rudimentaria) que llegaban a acuerdos entre las familias para los matrimonios.

Cuando el jefe hacía efectivo este derecho, colocaba unos enormes cuernos en la parte superior de la puerta de su casa, para que todos supieran que él tenía el privilegio de poder escoger a la mujer que quisiera. De aquí viene la expresión "poner los cuernos" que pervive en la actualidad. En un principio esta frase tenía connotaciones positivas hacia el padre de la elegida, pues para él era un honor que el jefe hubiese escogido a su hija. Sin embargo, también cogió un matiz peyorativo hacia el pretendiente que veía cómo el jefe le robaba a su pretendida, que es el que más o menos ha llegado hasta la actualidad.

1 comentario:

Lasinverso dijo...

Que gracia!! Los vikingos tenian que ser...Es curioso saber de donde viene la expresión...Un beso fuerte. Os añoro a todos!!