Un ejército de perros de andar por casa

Al poco de iniciar su participación en la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos decidió reclutar perros domésticos para adiestrarlos y enviarles al frente para que actuaran como correos, guardianes o como una especie de radares caninos para detectar la presencia del enemigo. Con su campaña "Perros para la defensa", el ejército se hizo con más de 50.000 perros domésticos para el uso militar.

Estos animales tuvieron un papel destacado en algunas acciones, como por ejemplo un chucho llamado Jims, que en 1943, durante el asalto a Italia, corrió hasta un nido de ametralladoras enemigo advirtiendo a los soldados estadounidenses de su posicón (que probablemente hubiese pasado desapercibida con fatal desenlace para estos soldados). Jims fue condecorado con la cruz de servicios distinguidos y el corazón púrpura de la Marina, aunque poco después le retiraron los reconocimientos, pues se originó una gran controversia por otorgar a un perro una distinción militar para personas. No obstante, Jims se convirtió en el único perro condecorado de todos los bandos de la Segunda Guerra Mundial.

Una guerra por pelotas

Enrique V (rey de Inglaterra de principios del siglo XV) deseaba convertirse en soberano de diversos territorios de Francia de los que pensaba que tenía derechos dinásticos. Para ello, pensó en casarse con Catalina de Valois, hija de Carlos VI de Francia. Envió su propuesta de matrimonio a los franceses y como única respuesta recibió una caja de pelotas de tenis con el mensaje de que mejor se dedicara a jugar y dejara lo de ampliar sus dominios al otro lado del Canal de la Mancha. Esta afrenta con las pelotas provocó que Enrique V organizara una flota y se lanzara a la guerra con Francia.

... tiran más que dos carretas

Los atributos femeninos han tenido una gran influencia en las decisones de los hombres desde tiempos inmemoriales. Un claro ejemplo ocurrió alrededor del 300 a.C en Grecia. Una de las cortesanas más bellas de su época, Mnesarete (algunos autores la llaman Friné), se enfrentó a un proceso judicial bajo las acusaciones de impiedad y libertinaje. Para su defensa contaba con un gran orador pero la gravedad de los cargos hizo que se le torcieran bastante las cosas. Ante el mal panorama que se le presentaba, el orador decidió tomar medidas drásticas. Sin previo aviso arrancó la ropa a su defendida hasta dejarla desnuda e interrogó a los allí presentes: ¿Seréis capaces de condenar a la mismísima diosa Afrodita?. Parece ser que los encantos de Mnesarete eran tales que el tribunal no pudo hacer otra cosa que no fuera absolverla, lo que demuestra que ya en la Grecia Clásica tiraban más dos tetas que dos carretas.

Los escotes y Juan XXIII

Antes de ser Papa, Juan XXIII asistió en calidad de cardenal a una cena en la que se encontró a una bella joven que atraía las miradas de los asistentes por el escote generoso de su vestido, lo que causaba desprecio al eclesiástico. En lugar de reprochar duramente a la joven, el cardenal decidió de tirar de modus operandi pastoral y utilizar la Biblia para la reprimenda. Esperó a que los postres estuviesen servidos y le ofreció una manzana a la joven mientras le decía: "Coma de esta manzana, hija mía, que aseguran que fue tras morder esta fruta cuando Eva comprendió que iba desnuda".

Los pícaros

En el comienzo de la Edad Moderna España era uno de los territorios más ricos por su vastas posesiones europeas y de ultramar. No obstante, mantener el Imperio salía caro y acabó pagándolo el pueblo, en el que amplios sectores sufrieron carestías y hambrunas, lo que provocó que se buscaran la vida como pudieran. Especialmente en los siglos XVI y XVII, las ciudades españolas vieron el auge de los pícaros. Entre ellos se distinguían varios tipos en función de su actividad:

- Cortabolsas. Eran los de estilo más bien clásico, pues se dedicaban a sustraer las bolsas de dinero con el mayor sigilo posible. Dentro de este grupo se encontraban los cigarreros, que eran conocidos por su habilidad en el manejo de las tijeras.
- Grumetes. Se dedicaban a pescar literalmente lo que querían robar mediante anzuelos y ganchos.
- Devotos. Aquellos pícaros que se dedicaban a robar en Iglesias y conventos.
- Sátiros. Eran los que presentaban cierta tendencia a llevarse como si fuera suyo el ganado ajeno.
- Estafadores. Hacían lo mismo que los de la actualidad pero además se usaba este término para denominar a los chantajistas.

Fuente: Muy Historia

El mote de Napoleón

Napoleón Bonaparte ha pasado a la Historia como el Enfant Terrible de Francia. No obstante, no siempre inspiró temor y respeto a los que le rodeaban. Cuando aún era sólo un alférez, Desirée, una de sus amantes de juventud, se reía del aspecto que tenía con las botas del ejército con su poca estatura (debía ser algo un poco grotesco). Ella le llamaba "el gato con botas". En lugar de enfadarse, Napoleón se lo tomó bien y terminó regalándole el cuento a su amante.

En honor de WC

En pleno apogeo nazi en la Segunda Guerra Mundial, Winston Churchill, primer ministro británico, se encontraba de visita oficial a la Royal Navy. En dicha visita acudió a ver cómo los cadetes realizaban unas prácticas que consistían en la explosión de un carguero para comprobar la potencia de nuevos misiles. Como se esperaba, el carguero explotó y quedó hecho pedazos. Uno de estos trozos fue una puerta del retrete con las iniciales WC. que flotaba cerca de donde se encontraba Churchill. Éste, ni corto ni perezoso exclamó: "¡La Royal Navy siempre tan gentil! No han dudado en marcar con mis iniciales los restos del buque!"

Fuente: Historia y vida

Circuncisiones comatosas

Los asirios (un pueblo que habitó en el norte de Irak hace algo más de 6.000 años) tenían una extraña costumbre en sus usos medicinales para aliviar el dolor en algunas operaciones, entre otras la circuncisión. Al desdichado paciente, para que no sufriera, se le inducía en un estado comatoso presionando sus arterias carótidas en el cuello, lo que le provocaba el consiguiente isquemia cerebral que le dejaba inconsciente. Era entonces cuando se le operaba. De este modo se evitaba el dolor que causa el hecho de que se le practique a uno una circuncisión así sin más, pero se corre el riesgo (como les ocurrió a algunos) de que no se despierte del coma.

Saludo inicial

Aquellas pequeñas cosillas que puede que pasaron inadvertidas, aquellas curiosidades de interés, aquellas hazañas extrañas de personajes con cierto papel en la Historia... Todo esto y mucho más, en breves momentos aquí, en Las cosillas de la Historia.